viernes, 3 de diciembre de 2010

Diciembre

Diciembre
Capítulo 1 
"Algún día alguien me derrotara, pero no será hoy y no serás tu."


En la inmensidad de reconocer que en el fondo estas muy solo y la gente que te rodea son hidalgos que te acompañan en mil batallas, otros son escuderos que paran golpes y te levantan, otras dulces e inolvidables princesas que arrebatan noches, otros meros villanos con los que pelear, pues nuestros grandes Némesis somos nosotros mismos. Todos formamos en cierto modo, protagonistas de nuestro cuento y secundarios en el resto.
Pero cabalgas solo, tu y tu caballo, tu y tu propio camino, tu y tu propia aventura, tu y tu propio destino.

Abrir el pecho, tirar el escudo al suelo y dejar que se te golpeé primero, levantandote a veces del rebote, otras de rabia, otras de voluntad, otras con la misma sensación de no querer pelear, otras porque el golpe no ha sido demasiado fuerte, otras simplemente porque no quieres perder, otras por que necesitas pelear, otras simplemente te levantas...pero tocas suficientemente, tantas veces el suelo, como personas que pasan en tu vida y bailan contigo.

Todo deja cicatriz.No cicatrizan las que no quieren o no se quiere que cicatrice, lo que crees que vale la pena ver como sangra la herida, no en un acto heroico ni mucho menos, mas bien, en un acto de decir : mierda la cague y aquí esta la prueba irrefutable de mi estupidez e ignorancia, acuerdate.
Si cicatrizan, las que no valen la pena, si las que las causan personas que en el fondo no les importas una mierda y salen de tu vida a la francesa, esas cicatrizan solas, en poco tiempo y son anécdota, triste, triste anécdota.

Así pues, mi querido lector, plantearte que quieres ser para mi, hidalgo o escudero, villano o princesa, cicatriz de agua o de fuego, pero no seas indiferente, pues seguro que si te conozco no te tengo indiferencia y no tengas miedo, pues el miedo hiere mas que cualquier palabra o espada...y dime si continuamos la aventura...